El Mundial 78 no detuvo ni por un momento la maquinaria de secuestros y desapariciones que la última dictadura argentina venía aceitando desde el 24 de marzo de 1976. Mientras miles de personas iban a las canchas, se juntaban en los bares a ver los partidos o salían a las calles a festejar los triunfos deportivos, decenas de conciudadanos eran detenidos ilegalmente en sus hogares, en sus lugares de trabajo o en la calle, para no volver a aparecer nunca más.
Entre el 1 y el 25 de junio de 1978, la Argentina vivió como nunca la disociación entre la esfera pública que vivaba las hazañas futbolísticas y el submundo de los centros clandestinos, en el que los gritos de sufrimiento se entremezclaban con los gritos de gol. Según el Registro Unificado de las Víctimas del Terrorismo de Estado (RUVTE), fueron más de 50 las personas que fueron secuestradas para ser desaparecidas durante los días en que la selección nacional completó su campaña para hacerse con la Copa del Mundo.
1 de junio de 1978
Todas las miradas estaban puestas en el Estadio Monumental para ver cómo la Argentina —ya conocida en el mundo por las denuncias de desapariciones— daba la bienvenida al mundo a un nuevo campeonato de fútbol. Ese mismo día se reportaban al menos dos secuestros en Capital Federal: el de Rubén Alfredo Martínez y el de Celestino Omar Baztarrica, que militaba en la Juventud Universitaria Peronista (JUP) de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Patricio, como lo conocían sus compañeros, cayó mientras volanteaba contra la dictadura afuera del estadio Monumental.
2 de junio de 1978
Mientras la Argentina hacía su debut en el campeonato y derrotaba por 2 a 1 a Hungría, se denunciaban las desapariciones de Ricardo Alfonso Freire y María Josefa Fernández en Capital Federal. Ricardo y María Josefa eran estudiantes de Derecho. María Josefa era la novia de “Patricio” Baztarrica.
3 de junio de 1978
El día que Holanda debutaba con una goleada de 3 a 0 contra Irán, y Brasil empataba en 1-1 con Suecia, Alicia Cristina Amaya era secuestrada. Alicia era estudiante de Servicio Social y también era parte del frente de la JUP de Derecho.
4 y 5 de junio de 1978
Julián José Delgado era el director del diario El Cronista Comercial y de la revista Mercado. Había estado en River para ver la inauguración del Mundial y el partido con Polonia. Fue secuestrado el 4 de junio de 1978 tras despedirse de su esposa María Ignacia Cercos. La mujer fue a ver al entonces ministro del Interior Albano Harguindeguy, quien le sugirió no difundir la noticia durante el Mundial para no afectar la imagen del país, según reconstruyó Diario sobre Diarios. Ni El Cronista ni Mercado publicaron la primicia del secuestro de Delgado. Lo hizo el Buenos Aires Herald.
El 5 de junio, los grupos de tareas se llevaban a Fernando Rafael Santiago Díaz y Raúl Pedro Olivera. Los dos eran uruguayos y militaban en la Resistencia Libertaria. Fueron secuestrados en la Capital Federal y vistos por sobrevivientes en El Banco. Esos días no se jugó ningún partido, pero el fervor mundialista iba en ascenso.
6 de junio de 1978
Una falta casi al final del primer tiempo puso a la Argentina en ventaja. El encargado de ejecutarlo fue el capitán Daniel Passarella. Michel Platini, la estrella de Francia, logró poner en igualdad el marcador en el segundo tiempo. Los argentinos contuvieron la respiración, hasta que a los 73 minutos Leopoldo Jacinto Luque marcó el segundo gol, el de la victoria. Mientras el país festejaba el triunfo frente al equipo galo, se reportaban dos desapariciones: la de Victorino Acuña, en Córdoba, y la de Edison Oscar Cantero, el militante uruguayo de la Resistencia Libertaria, en Capital Federal.
7 de junio de 1978
Mientras Holanda empataba con Perú, María Ester Sonzini era asesinada en Campo de Mayo, la mayor guarnición militar del país.
8 de junio de 1978
El 8 de junio no se jugó ningún partido. Ese día fue secuestrado Juan Mateo Nieto en Río Negro. Tenía 24 años, trabajaba como gasista y militaba en el Partido Socialista Popular. A la familia le dijeron que había sido asesinado en un vuelo de la muerte.
9 de junio de 1978
Mientras los argentinos esperaban el partido del día siguiente contra Italia, encuentro en el que el seleccionado nacional iba a ser derrotado por la azzurra, los grupos de tareas de la dictadura secuestraron al abogado uruguayo Héctor Orlando Giordano. Estuvo secuestrado en Automotores Orletti.
11 de junio de 1978
Mientras el país lloraba por el 1 a 0 contra Italia, y Perú goleaba por 4 a 1 a Irán, al menos tres personas eran secuestradas para no aparecer más: Raúl Alberto Repetto, Verónica Freier y Sergio León Kacs. Verónica y Sergio, su compañero, militaban en el Partido Obrero. Fueron secuestrados en El Palomar y llevados a la Escuela de Mecánica de la Armada.
12 y 13 de junio de 1978
No hubo partidos del Mundial ni el 12 ni el 13 de junio. El 12, la dictadura secuestró en Misiones a Rafael Eduardo Ulloa. Al día siguiente, Eduardo Rubén Lugo fue desaparecido.
14 de junio de 1978
La Argentina se recuperó de la caída contra Italia para debutar en la segunda ronda con un 2 a 0 contra Polonia. Mientras los argentinos recuperaban la ilusión, los grupos de tareas secuestraban a Roberto Ignacio Gaitán en Gregorio de Laferrere, La Matanza.
15, 16 y 17 de junio de 1978
Entre el 14 y el 18 de junio no hubo partidos, pero las desapariciones no cesaron. El 15 secuestraron a Irma Ana Nesich en Isidro Casanova. Irma era maestra normal y había estudiado Filosofía. Fue una de las fundadoras del ERP-22, cercano al peronismo. Fue vista en el centro clandestino El Banco y luego en El Olimpo.
El 16 de junio fue asesinado Héctor Luis Sopelana. El 17 desaparecieron a Hugo Julián Luna. Hugo tenía 34 años, era maestro mayor de obra y fue secuestrado en Ezpeleta. Era militante comunista y fue visto en El Olimpo. Sus restos fueron exhumados en 2001 en el cementerio bonaerense de General Lavalle por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).
19 de junio de 1978
Los argentinos seguían con preocupación los resultados de los partidos después del empate en cero del seleccionado nacional con sus pares de Brasil del día anterior. Mientras se hacían números y se esperaba el encuentro con Perú, el 19 de junio fue secuestrada en Tucumán Norma Delia Sibantos, una modista que estaba embarazada. Su cadáver fue localizado gracias al trabajo del EAAF 30 años después, en Santiago del Estero.
20 de junio de 1978
No hubo partidos el 20 de junio, pero fue el día que se registró el mayor número de desapariciones ocurridas durante el Mundial.
Toribio Patiño ya estaba acostado cuando escuchó los gritos que le ordenaban que abriera la puerta de su casa. Después vinieron los tiros. Su mujer, Luciana Solis, estaba en el baño cuando empezó el alboroto. Toribio era albañil y militaba en la JP. Vivían con lo justo en una casa de Isidro Casanova. Se lo llevaron junto a su mujer. En la casa, quedaron sus tres hijos esperando a que amaneciera para ir a avisarle a su abuela que se habían llevado a sus padres.
En la madrugada del 20 de junio también se llevaron a Roberto Alejandro Zaldarriaga de la casa de sus padres, nuevamente en Isidro Casanova. Militaba desde chico en el peronismo. Testigos lo vieron primero en el centro clandestino El Banco y fue posteriormente trasladado al Olimpo.
Juan Carlos Lukaszuc y Margarita Ortiz fueron secuestrados en Mariano Acosta, en el partido de Merlo.
En Ciudadela, se llevaron a María Alejandra de Pablo, que tenía 25 años y militaba en la Juventud Universitaria Peronista.
21 de junio de 1978
Argentina lograba lo que parecía imposible: ganarle 6 a 0 a Perú. En las calles de la Capital Federal, un grupo de tareas secuestraba a una parejita marplatense. Se trataba de Alicia Segarra y de Carlos María Mendoza. Militaban en Montoneros. Alicia estaba embarazada de dos meses.
22 de junio de 1978
La Argentina todavía festejaba el polémico triunfo a Perú, que había puesto a la selección anfitriona en la final. Ese día fue secuestrada la abogada Mirta Graciela López. Tenía 31 años, estaba ligada a la defensa de los presos políticos de Montoneros y militaba en la Comisión Argentina por los Derechos Humanos (CADHU).
23 de junio de 1978
Faltaba un solo día para que Brasil e Italia se enfrentaran por el tercer puesto. La Brigada de San Justo llegó hasta la casita que habitaban en Merlo Laura Beatriz Segarra y Pablo Torres. Laura tenía 18 años y estaba embarazada de nueve meses. Faltaban días para que tuviera a su bebé. Dos días antes, una patota había secuestrado a su hermana Alicia. Pablo tenía 22 años y trabajaba como maestro mayor de obras. La abuela Antonia Segarra, la “Negrita”, todavía busca a sus nietos o nietas, los hijos de Alicia y de Laura.
María Segunda Casado tenía 24 años y un embarazo de siete u ocho meses cuando fue secuestrada en su casa de Villa Tesei junto a su marido, Pedro Arturo Frías. Pedro era obrero ceramista y tornero. Tenían un hijo de poco más de un año, Mario. Los dos militaban en Montoneros.
24 de junio de 1978
Toda la expectativa estaba puesta en el día siguiente: la Argentina iba a jugar la final y podía hacerse con la Copa del Mundo por primera vez en su historia. En el partido de General Las Heras, el nordeste de la provincia de Buenos Aires, un grupo de tareas secuestraba a Silvia Mónica Paolucci y a su pareja, Jorge Leonardo Fraga. Silvia estaba embarazada y tenía 26 años. Jorge tenía 24 años y era obrero de la construcción. En 1976, habían secuestrado a su anterior compañera, Susana Flora Grynberg, que estaba también embarazada. Testimonios indican que Susana había sido llevada a Campo de Mayo.
25 de junio de 1978
Argentina campeón. Tres a uno contra Holanda. Papelitos celestes y blancos llueven desde las tribunas. El pueblo festeja. La Junta festeja. Daniel Passarella, el capitán, besa la copa. Guillermo Marcelo Möller, empleado de la fábrica Acustex y militante de Política Obrera, fue secuestrado en Capital Federal. Testimonios indican que pasó por el Banco y luego por el Olimpo.
Sin fechas
Según el RUVTE, hubo otras personas secuestradas en junio de 1978: Vicente Oscar Catalán, Miguel Ángel Montero, Alicia Josefina Domínguez, Ramón Duarte y Miguel Doldán. Entre mayo y junio, Ana María Tortti fue secuestrada en Mar del Plata y asesinada el 13 de julio de 1978. Estudiaba Arquitectura en la Universidad Nacional de La Plata y militaba en el Partido Comunista Marxista Leninista (PCML). Sus restos fueron identificados en 1987. Entre junio y julio, fueron secuestrados Gerardo Adolfo Barone, Eduardo Ernesto Condomí y Salvador Sliba. Todos ellos permanecen desaparecidos.